CONTROL DE LA PROPAGACION DEL FUEGO
Una forma clásica de controlar el incendio es empleando compartimentadores verticales y horizontales. Esta compartimentación – sectorización-, sin embargo, sólo es satisfactoria si no hay pasos para el humo o las llamas a través de la periferia de la sectorización. El incendio puede propagarse por el interior de un edificio mas allá de su punto de origen si las barreras previstas son incapaces de contenerlo debido a unos cierres insatisfactorios en el recinto en el que se ha originado.
La diversa normativa vigente fija criterios de sectorización, las cuales deben adoptarse mediante una efectiva política de gestión de la seguridad desde el inicio del proyecto. Consúltenos.
Fuente: Adaptación artículo J. M. Lacosta Berna, Rev. Mapfre Nº 67.
Una forma clásica de controlar el incendio es empleando compartimentadores verticales y horizontales. Esta compartimentación – sectorización-, sin embargo, sólo es satisfactoria si no hay pasos para el humo o las llamas a través de la periferia de la sectorización. El incendio puede propagarse por el interior de un edificio mas allá de su punto de origen si las barreras previstas son incapaces de contenerlo debido a unos cierres insatisfactorios en el recinto en el que se ha originado.
La diversa normativa vigente fija criterios de sectorización, las cuales deben adoptarse mediante una efectiva política de gestión de la seguridad desde el inicio del proyecto. Consúltenos.
Fuente: Adaptación artículo J. M. Lacosta Berna, Rev. Mapfre Nº 67.