13.6.08

Herramientas Manuales. Manejo Seguro.

La manipulación de herramientas manuales comunes como martillos, destornilladores, alicates, tenazas y llaves diversas, constituye una práctica habitual en obras, talleres de mantenimiento, así como en laboratorios y aulas de prácticas de centros docentes, como la Facultad de Bellas Artes, debido a que muchas de las operaciones que se realizan en dichos locales sólo pueden llevarse a cabo de forma manual.
Aunque a primera vista tales herramientas puedan parecer poco peligrosas, cuando se usan de forma inadecuada llegan a provocar lesiones (heridas y contusiones, principalmente) que de modo ocasional revisten cierta gravedad, hasta el punto de que un 7% del total de accidentes que se producen anualmente en España y un 4% de los calificados como graves, tienen su origen en la manipulación de una herramienta manual. Si bien las causas que provocan estos accidentes son muy diversas, pueden citarse como más significativas las siguientes:
Calidad deficiente de las herramientas.
Uso inadecuado para el trabajo que se realiza con ellas.
Falta de experiencia en su manejo por parte del usuario.
Mantenimiento inadecuado, así como transporte y emplazamiento incorrectos
Recomendaciones generales
De acuerdo con estas consideraciones, las recomendaciones generales para el correcto uso de estas herramientas, con el fin de evitar los accidentes que pueden originar, son las siguientes:
Conservación de las herramientas en buenas condiciones de uso.
Utilización de las herramientas adecuadas a cada tipo de trabajo que se vaya a realizar.
Entrenamiento apropiado de los usuarios en el manejo de estos elementos de trabajo.
Transporte adecuado y seguro, protegiendo los filos y puntas y manteniéndolas ordenadas, limpias y en buen estado, en el lugar destinado a tal fin.