Introducción: La corrosión del acero de refuerzo, representa en forma integral el problema de durabilidad que más afecta a las estructuras de concreto.
Se reconocen a priori dos causas de la corrosión del acero de refuerzo:
- La que se debe a la formación de una corriente eléctrica en el concreto, que es la que con mayor frecuencia se presenta.
- La debida a un ataque químico directo, que es la vista con menor frecuencia.
La primera, y más común, requiere para su ocurrencia la presencia de las siguientes condiciones: falta de protección del acero de refuerzo, presencia de agua, oxígeno disponible y la presencia de agentes corrosivos (Cl- y/o CO2).
Favorecen la Corrosión:
- La presencia de agua y/o oxígeno.
-El proceso de carbonatación (presencia de CO2), disminuye de manera superficial el pH del concreto. Aunado a lo anterior, este proceso puede originar un incremento en la porosidad de la estructura.
- Presencia de cloruros en la parte interna de la estructura o en el ambiente que se ubica.
Limitan la Corrosión:
- Ejecución de un concreto impermeable, con un diseño de mezcla adecuado que reduzca la formación de espacio poroso. Es recomendable la aplicación de una baja relación agua/cemento y la aplicación de adecuados procedimientos constructivos y de curado, para dar un concreto uniforme y de buena compacidad.
- Adecuado dimensionamiento del espesor del recubrimiento de concreto. Este debe ser definido con base al nivel de riesgo de corrosión en la estructura, además se debe ser mantenido o ligeramente incrementado.- En consideración de las condiciones de servicio de la estructura, limitar el contenido interno de los cloruros, para no superar el límite de riesgo de la corrosión.
- Aplicación directa de recubrimientos en la superficie de la varilla o la colocación de una protección catódica al acero de refuerzo.
- Incorporación de aditivos en la mezcla de concreto que inhiban el desarrollo de este tipo de proceso. Es posible el uso de aditivos inhibidores de la corrosión, o se puede considerar el uso de aditivos minerales finamente divididos que reducen en forma considerable la permeabilidad del concreto.
Procedimientos de Evaluación de la Corrosión del Acero de Refuerzo:
- Inicialmente, una inspección visual, enfocando la búsqueda a la presencia y orientación de fisuras y aparición de óxido de hierro en la superficie del concreto.
- Inspección física siguiendo la posición del acero de refuerzo, utilizando para ello un martillo común para detectar zonas de mala calidad física asociada con la posición de las varillas; una aplicación más calificada puede implicar el uso del esclerómetro.
- Utilización de un dispositivo electromagnético (Pacómetro), para verificar el espesor del recubrimiento de concreto sobre las varillas.
- Obtención de núcleos de la estructura para estimar la profundidad de la carbonatación y estimar la variación del pH a diferentes profundidades.
- Determinación química del contenido de cloruros solubles en agua.
- Evaluación del grado de pasivación en que se hallan las varillas, utilizando para ello la prueba de potencial eléctrico.
Fuente: Arquitectuba